Colombia perdió ante Argentina en Barranquilla

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“Por una tormenta se aplazará el partido”, decían varios medios argentinos antes del inicio del juego. Sin embargo, tan sólo cayeron algunas gotas en Barranquilla y el compromiso se llevó a cabo con normalidad. Como ya es habitual, el estadio Metropolitano fue un hervidero. A pesar de que el cielo estuvo nublado y el sol nunca brilló con todo su esplendor, el calor fue fuerte, porque hubo mucha humedad y eso hizo que la sensación térmica fuera peor de lo esperado. El ambiente, como siempre, fue de fiesta, pero la tormenta llegó con el mal juego del equipo de Pékerman, que no generó fútbol y se vio muy disminuido. Por eso perdió 1-0. Por primera vez desde que el DT argentino está con Colombia, se ceden los tres puntos en casa. Cayó así un invicto de nueve partidos, con un balance de siete triunfos y dos empates.

De entrada no hubo sorpresas por parte de ninguno de los entrenadores. En Colombia, José Pékerman hizo cuatro cambios respecto al once inicial que el jueves anterior disputó el partido con Chile en Santiago. Por el suspendido Santiago Arias ingresó Helibelton Palacios en la posición de lateral derecho. Por Carlos Sánchez entró Macnelly Torres, cambiando el módulo de tres volantes de marca a dos de contención y dos de creación. Además modificó los dos delanteros, dándole la confianza en Barranquilla a la dupla Teo-Bacca. Gerardo Tata Martino, por su parte, utilizó un 4-3-3 en el cual la única novedad era el defensor de River Plate Gabriel Mercado, quien jugó por la banda derecha.

A pesar de que el equipo colombiano fue una ratificación de lo anunciado, se destacó la cantidad de jugadores nuevos que no hicieron parte del proceso anterior, camino a Brasil 2014. Una confirmación más de lo que ha venido anunciando Pékerman, quien ha pedido paciencia porque, a diferencia de muchos de los rivales en la eliminatoria, que cuentan con la misma base desde hace varios años, él ha tenido que jugársela por futbolistas que hasta ahora están sumando sus primeros partidos con el equipo tricolor. De los once, solamente David Ospina, James Rodríguez y Teófilo Gutiérrez fueron titulares indiscutidos en el proceso anterior.

Cuando Colombia estaba mejor, y ya comenzaba a tocar y a buscar el arco, con mayor presencia de jugadores en la cancha rival, Argentina aprovechó un retroceso erróneo de la defensa tricolor y se fue adelante en el marcador en el minuto 19. Lavezzi desbordó por derecha y centró a ras de piso. Cristian Zapata se pifió en el rechazo y en el segundo palo apareció Lucas Biglia, quien solamente tuvo que tocar sin fuerza el balón para enviarlo al fondo de la red.

El tanto fue un baldado de agua fría, porque ahí quedó la iniciativa que tenía el equipo colombiano y aparecieron las dudas, los nervios y los errores en la entrega de la pelota. Daniel Torres y Alexánder Mejía no estuvieron seguros en la recuperación ni en la entrega, quizás porque los laterales subían pero no regresaban, y eso hacía que el equipo quedara mal parado. En cuanto a la generación de fútbol, Macnelly Torres era impreciso y no lograba asociarse con James Rodríguez, como lo hizo Edwin Cardona en el juego con los chilenos, así que los delanteros tuvieron que sufrir para poder entrar en acción. Como es habitual en el estilo de Teófilo Gutiérrez, bajaba y buscaba asociarse con los volantes para armar juego, mientras Carlos Bacca sufría, como se han acostumbrado a hacerlo los delanteros del equipo tricolor en los últimos tiempos.

En la parte complementaria José Pékerman sacó a Macnelly para darle paso a Luis Fernando Muriel, quien se ubicó como extremo izquierdo y en un  principio mostró que con su velocidad y potencia se podría vulnerar a la defensa argentina. No obstante, los albicelestes seguían dominando el partido y ejecutando el plan que tenía Gerardo Martino, quien había anunciado en los días previos al juego que “la clave será quitarles la pelota y hacerlos correr más”. Precisamente por eso en Colombia salióTeófilo Gutiérrez e ingresó Edwin Cardona, quien le cambió la cara al equipo nacional por unos instantes, pero luego volvió a verse la misma falta de ideas.

Lo que viene ahora es corregir. Hay muchas cosas que no están funcionando y el deber del cuerpo técnico es trabajar. De acá a marzo, cuando regresen las eliminatorias, tocará hacer microciclos de trabajo, buscar alternativas para darle un nuevo rumbo al barco. Justamente para el próximo partido, contra Bolivia en La Paz, el 20 de marzo del año entrante, no podrán actuar Daniel Torres ni Cristian Zapata, por acumulación de amarillas. Ojalá para ese día estén en nivel de competencia varios de los jugadores que no han podido volver a estar y eran fundamentales, como Abel Aguilar, Radamel Falcao García y los laterales Zúñiga y Armero.

Fuente: El espectador